Resulta que hoy es mi santo. Por haberme educado con monjas sabía que mi nombre tenía presencia en el santoral, aunque siempre había creído que sólo en el ortodoxo, y no estaba al tanto de la fecha. Gracias a Tomás me entero de que la iglesia católica también honra a mi tocaya. Por lo que leo, era un encanto de chiquilla aficionada a asar a sus enemigos por medio de palomas y gorriones. Qué maja. Como dice el artículo en MetaFilter, es toda una Lannister... Me da que no nos llevaríamos bien.
Esto resuelve el misterio de por qué el cura dejó a mi madre salirse con la suya y ponerme este nombre en el bautizo. Todos los días se aprende algo.
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